Es una solución en diversos aspectos, además del económico, si no conoces a nadie en el país, es además una buena manera de contactarte con otra gente y hacer nuevas amistades, además de poder lograr una mejor ubicación y mayores comodidades que en otro tipo de alojamientos. Lo más importante es que logres congeniar con la persona que vas a compartir el lugar. Es importante aclarar de antemano ciertos temas como por ejemplo mascotas, tabaco, tareas de limpieza, etc., que en algún momento podrían acarrearte más de un dolor de cabeza. Es importante asegurarte que tienen estilos de vida similares.
Contratos para departamentos compartidos
En caso de que decidas compartir el apartamento, debes saber que en el contrato deben figurar todos los inquilinos, ya que si tu nombre no figura en él, te pueden desalojar si los otros abandonan el piso. En muchas ocasiones el inquilino subarrienda el departamento sin realizar modificaciones en el contrato y puede ser ventajoso en cuanto deja fuera a la agencia inmobiliaria, pero, de este modo, en cualquier momento puedes ser desalojado.
Existen en Francia diversas agencias encargadas de buscar apartamentos compartidos, como por ejemplo EasyRoomate (easyroommate.com). A través de ellas puedes poner tu anuncio además de consultar las interminables listas que ofrecen y en las que encontrarás gente que quiere compartir su vivienda.